Las cooperativas mineras auríferas del país se desvincularán de su ente matriz, la Federación Nacional de Cooperativas Mineras de Bolivia (Fencomin), porque arguyen que la forma de trabajo es totalmente diferente al del sector cooperativo tradicional.
La Federación Regional de Cooperativas Mineras Auríferas (Ferreco) y la Federación de Cooperativas Mineras del Norte de La Paz (Fecoman LP) agrupan a unas 850 asociaciones que representan el 50% del total de afiliadas a Fencomin, según datos proporcionados a La Razón por estos dos entes.
El 29 y 30 de este mes, las cooperativas auríferas se reunirán en La Paz para constituir la Federación de Cooperativas Mineras Auríferas de Bolivia (Fecmabol), a la que convocaron al 100% de sus socios, informó el presidente de Ferreco, Edmundo Polo.
Explicó que las diferencias con el sector minero tradicional son “sustanciales y de fondo”, motivo por el que desean ser reconocidos solo como mineros auríferos. “Tenemos diferencias estructurales en los sistemas de explotación, de producción, de comercialización, en los sistemas mismos de trabajo, somos totalmente diferentes. Si bien somos mineros, nuestro sector es diferente desde el momento en que iniciamos las operaciones mineras en nuestras áreas de trabajo a partir de hacer sendas, caminos, exploraciones, la logística; lo hacemos desde un principio”, manifestó el dirigente minero.
Detalló que el trabajo que realizan las cooperativas auríferas es “centralizado” en la producción, comercialización y distribución de las ganancias a nivel de cada cooperativa, donde el directorio tiene conocimiento de todo el proceso. “Generamos excedentes, los que distribuimos por partes igualitarias a los socios, en cambio los tradicionales no, ellos manejan de forma personal sus parcelas de trabajo, a través de cuadrillas de particulares. Un socio con su cuadrilla que saca mineral puede estar bien y el de lado puede estar mal”, señaló.
NORMA. Según Polo, con esta diferenciación se comprende que su sector cumple a cabalidad los preceptos de la Ley General de Cooperativas y se constituyen en “verdaderos cooperativistas”. El presidente de Fecoman LP, Julián Chino, dijo a La Razón que los mineros auríferos generalmente llegan a ser entre 30 y 50 socios por cooperativa, y en algunos casos llegan a un número máximo de 300 socios. En cambio, añadió, los asociados de las cooperativas tradicionales llegan de 1.000 a 1.500. Según su opinión, la conformación de una nueva federación será “muy beneficiosa” para ambas partes y también para el Gobierno en curso, porque se tendrá dos federaciones: “la tradicional y los auríferos”.
Polo añadió que una causa inicial para definir la desmarcación de Fencomin fue el “maltrato, discriminación, agresiones verbales y físicas que sufrieron sus asociados en el Congreso Ordinario de Fencomin”, realizado en la ciudad de La Paz el 16 de enero. Las bases “ordenaron el repliegue definitivo”, a partir de lo cual se hicieron los trámites y gestiones necesarias. “Solo falta el tema político”, manifestó. Según la convocatoria a la Asamblea Constitutiva de la nueva federación, fijada para el 29 de este mes, los asociados se concentrarán a las 08.00 en la Ceja de El Alto para realizar una marcha que pasará por el centro paceño.
Cooperativas auríferas
Asociados
Suman 850 entre Ferreco y Fecoman LP. Los asociados llegan a unos 30.000. La Federación Departamental de Cooperativas Mineras de La Paz también tiene auríferos.
Total
En Bolivia se cuantifican unas 1.700 cooperativas mineras, de las que 1.000 son auríferas.
Santos dice que la ley no permite otra federación
La Federación de Cooperativas Mineras de Bolivia (Fencomin) no reconocerá a la nueva Federación de Cooperativas Mineras Auríferas de Bolivia (Fecmabol), conformada por asociaciones dedicadas a la explotación del oro, y que se constituirá el 29 de este mes. El presidente de Fencomin, Alejandro Santos, dijo a La Razón que la Ley General de Cooperativas prohíbe la existencia de una federación alterna, por lo que ésta no tendrá vigencia ni validez.
“La Ley de Cooperativas prohíbe totalmente, no puede haber una federación paralela a la Fencomin de Bolivia, es insulso. Lo que los compañeros pretenden es en vano, hacen creer ilusiones a los compañeros de base”, indicó. El dirigente de los cooperativistas solicitó reconsiderar su posición a los representantes de Ferreco y de Fecoman La Paz, quienes impulsan la nueva federación.
APORTES. Recordó que el malestar de las regionales mencionadas surgió a raíz de la elaboración del nuevo estatuto del ente matriz, en el punto referido a los aportes. “Las dos federaciones (Fecoman La Paz y Ferreco) no estaban de acuerdo, ellos querían seguir aportando Bs 5 por socio”, expresó el dirigente cooperativista.
Manifestó que pese a esta divergencia, la Fencomin mantiene el trabajo por todas las cooperativas que la conforman, tradicionales, no metálicas y auríferas y que lo seguirá haciendo aún con la decisión de división de algunas.
Fuente: periódico "La Razón"
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