En un año, el Índice Global de la Actividad Económica (IGAE) del país disminuyó de 5,19%, registrado en mayo de 2015, a 4,3%, comparado con similar fecha de este año principalmente por la caída de ingresos por la baja de los hidrocarburos, informó el presidente Evo Morales.
El mandatario también dijo que al primer trimestre de este año el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) llegó a 4,9%, que sitúa a Bolivia en el primer lugar de crecimiento económico de Sudamérica (ver infografía).
"Quiero informarles, hermanos y hermanas, no podemos ocultar, a mayo de este año de acuerdo al IGAE, que se entiende cómo hemos caído en crecimiento económico (llegó) a 4,3%, si el primer trimestre teníamos 4,9%, ahora a mayo es 4,3%, no está tan confirmado son los datos que tenemos”, informó durante la sesión de honor por el 191 aniversario de independencia de Bolivia, en Tarija.
El IGAE es un indicador que el Instituto Nacional de Estadística (INE) publica mensualmente y mide aproximadamente la evolución temporal del ritmo mensual de la actividad económica nacional con cifras preliminares que pueden ser modificadas.
Este índice es un indicador adelantado del crecimiento económico; mientras que el PIB contempla un sistema completo y coherente que permite además, obtener otros indicadores macroeconómicos resumidos en el Cuadro de Oferta y Utilización (Matriz Insumo Producto), informó ayer el Ministerio de Economía.
El ministro Luis Arce afirmó que la economía de Bolivia sigue creciendo pese a un contexto internacional adverso marcado por la baja de precios de las materias primas y los golpes de la sequía, principalmente en el oriente.
"Estamos bien a pesar de la desaceleración que se evidenció hasta mayo, cuando la economía se contrajo a 4,3%, respecto a marzo, que era 4,9%. Una desaceleración estimada, pero que ojalá no se confirme cuando saque el INE el dato trimestral (a junio)”, dijo Arce, según ABI.
La autoridad agregó que se tiene el Plan de Desarrollo Económico para combatir la sequía y lograr el crecimiento y convertirnos por tercer año consecutivo en la economía con mayor dinamismo en la región.
El crecimiento de los sectores
De acuerdo con el informe del Presidente, el crecimiento económico acumulado de actividades a mayo de este año reflejan que el crecimiento del establecimiento financiero alcanzó 7,8%; construcción 7,4; minerales metálicos, 6,9%; electricidad, gas y agua, 6,4; servicios de administración Pública logró 6,2%.
La industria manufacturera registró al quinto mes 5,7%; transporte y almacenamiento, 5,5%; comunicaciones, 4,7; agropecuaria, 1,1%. A diferencia de los anteriores, el sector del petróleo y gas natural tuvo una cifra negativa de 3,8%.
Cerca al 50% del valor de las exportaciones que Bolivia genera depende de la venta de hidrocarburos, principalmente del gas natural, pero éste fue afectado por la caída de la cotización del petróleo, debido a que está indexado al mismo.
El precio registró un descenso de más de 100 dólares el barril, en junio de 2014, a 26 dólares en enero de este año. La semana pasada cerró en promedio por encima de los 42 dólares el barril.
Los organismos
En su reciente informe el Banco Mundial incrementó la previsión de crecimiento económico para Bolivia de 3,5% a 3,7% durante la presente gestión.
Mientras que la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) señaló, en su proyección de crecimiento actualizada al 30 de junio, que Bolivia tendrá el mayor crecimiento de Sudamérica con 4,5%, en un contexto de contracción de la región hasta un -0,8%. Afirmó que será el tercero de Latinoamérica.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) proyectó que Bolivia crecerá un 3,8%, cifra que fue cuestionada por el Gobierno.
Para este año el Gobierno proyectó un crecimiento económico del 5,01%. En 2015 cerró en 4,85%, uno de los más bajos desde 2012, que fue afectado por el menor crecimiento de los sectores petróleo crudo y gas natural; los minerales metálicos y no metálicos.
Punto de vista
Juan antonio morales Expresidente del BCB
Llama la atención el déficit fiscal y la balanza de pagos
La reducción de la actividad económica, creo que se debe principalmente a la caída en la producción del sector de hidrocarburos.
También la construcción se ha estado desacelerando, sobre todo en su componente ligado a las inversiones públicas. Por las dificultades de financiamiento con la caída de los ingresos del IDH, los gobiernos subnacionales (gobernaciones y alcaldías) no están pudiendo ejecutar sus programas de inversión, que tienen un alto componente de construcción.
Creo que el PIB y el IGAE van a tener un menor crecimiento que el año 2015, aunque no me atrevo a dar una cifra porque hay mucha volatilidad en los mercados, lo que incide sobre la actividad económica.
Creo también que hay problemas mucho más preocupantes que un eventual descenso de la tasa de crecimiento del PIB.
Esos problemas son el alto déficit fiscal, que el año pasado llegó a 6% del PIB e igualmente el alto déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos, principalmente, porque se está importando más de lo que se exporta.
Esos déficit se están financiando con las Reservas Internacionales. No es que no se deba emplear las Reservas, sino que hay que hacerlo juiciosamente y no financiando proyectos alocados de escasa importancia económica y social.
Fuente: periódico "Página Siete"
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