El decreto 23022, promulgado hace 25 años, por el entonces presidente de Bolivia, Jaime Paz Zamora, es un escollo para la ampliación de los cultivos de caña en la provincia Abel Iturralde, donde se edificó la Empresa Azucarera San Buenaventura (Easba), que ayer inició su primera zafra comercial.
“Hemos esperado este proyecto desde hace más de 60 años, pero tenemos limitaciones legales con el decreto de 1991, que crea la Reserva Forestal de Inmovilización Abel Iturralde. Esta limitación nos ha quitado el derecho de poder avanzar en el cultivo extensivo. Se está trabajando en la abrogación de esa normativa porque desautoriza el chaqueo superior a las 5 hectáreas por familia”, explicó el alcalde del municipio de San Buenaventura, Javier Delgado.
No obstante, apreció que la infraestructura de Easba esté a punto de concluir, con la esperanza de que sea el principal factor de desarrollo de esa región, al norte del departamento de La Paz.
Impulso
Autoridades de Gobierno indicaron, sin embargo, que no será necesario derogar el decreto de Jaime Paz y que se impulsará directamente la producción de los vecinos.
En este sentido, el gerente de Easba, Ramiro Lizondo, señaló que se están definiendo las áreas de plantación de caña, los planes de ordenamiento predial, de desmonte y los convenios de asistencia y servicio agrícola. “Una vez cumplido eso, comenzamos el desmonte, la preparación de suelos y la plantación de caña”, señaló.
Inicio de la zafra comercial
El presidente Evo Morales dio inicio ayer a la primera zafra comercial de Easba, maniobrando la máquina cosechadora en el primer surco.
La molienda durará 22 días y se estima cosechar al menos 78.000 toneladas de caña, con una producción de 140.000 quintales de azúcar y un millón de litros de alcohol, en su primera etapa.
La planta está diseñada para procesar entre 7.000 y 8.500 toneladas de caña al día, para la producción de 1,2 millones de quintales de azúcar, objetivo que se prevé se alcanzará has-ta 2021. Se necesita entre 11.000 y 14.000 hectáreas de caña cultivadas.
Por el momento, la azucarera se proveerá de los cultivos de 1.500 hectáreas, 500 de las cuales son de propiedad de 90 familias de comunitarios.
Luego de la inspección de las instalaciones de la azucarera, Morales y el presidente de la Empresa Nacional de Electrificación (Ende), Eduardo Paz, también inyectó desde la planta azucarera los primeros 1,9 megavatios de energía eléctrica al Sistema Interconectado Nacional (SIN), que en los próximos años alcanzará los 13 megavatios.
Fuente: periódico "El Deber"
No hay comentarios:
Publicar un comentario