El programa fiscal-financiero suscrito por el Ministerio de Economía y el Banco Central de Bolivia (BCB) prevé cerrar el último trimestre del año con un déficit fiscal de 16.347 millones de bolivianos (equivalente a 2.345 millones de dólares).
La brecha programada es equivalente al 6,5% del Producto Interno Bruto (PIB), que este año se espera que alcance los 267.059 millones de bolivianos, según el Presupuesto General del Estado (PGE) 2017.
En la Ley Financial el Ministerio de Economía proyectó un déficit fiscal de 7,8%, que según las autoridades del sector se origina en una agresiva inversión pública financiada por el ahorro de años anteriores y financiamiento externo.
Para el secretario general de la Gobernación de Santa Cruz, José Luis Parada, el hueco fiscal tiene que ver con la caída de ingresos por hidrocarburos y minerales, pero también con el descontrol que existe entre ingresos y gastos del Gobierno, empresas públicas y ministerios del aparato central.
Según un análisis de esa Gobernación, la única manera en la que se podrá financiar el déficit es con el gasto de las Reservas Monetarias Internacionales (RIN), con emisión monetaria inorgánica, gastar la plata de las jubilaciones con créditos internos, dejar de entregar en efectivo los aportes de funcionarios públicos en la futura Gestora de Pensiones o la emisión de bonos del Tesoro.
De hecho el Gobierno dispuso el uso del 1% de los fondos de pensiones para canalizar recursos al sector agropecuario a través de un fondo y tiene en mente completar un 5%.
El año pasado las exportaciones de gas natural bajaron de 3.771,5 millones de dólares a 2.045 millones de dólares, un 45,8% menos que en 2015.
Financiamiento
El programa fiscal-financiero del BCB y el Ministerio de Economía fija un financiamiento interno al sector público de 4.347 millones de bolivianos hasta el último trimestre del año, además 1.601 millones de bolivianos de crédito interno neto del BCB al sector público no financiero (SPNF).
El crédito interno neto total alcanzará hasta los 6.966 millones de bolivianos (ver gráfica).
El 22 de diciembre de 2016, el directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) subrayó los riesgos que plantea para Bolivia un déficit fiscal elevado y creciente. Alentó a las autoridades a mejorar el saldo primario no vinculado a los hidrocarburos racionalizando el gasto y mejorando su eficiencia.
El año pasado, las finanzas públicas registraron un déficit fiscal de 6,7%.
Fuente: periódico "Página Siete"
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