La caída de la cotización de los granos en el mercado interno y el ingreso ilegal de mercancías de países vecinos, principalmente Argentina y Brasil, atribuido a la depreciación del peso argentino y al real brasileño, estrangulan a los productores de azúcar, arroz, maíz, soya, trigo y lácteos.
La dirigencia sectorial pide al Gobierno promulgar un decreto que prohíba la importación legal de dichos alimentos por un periodo de seis meses.
La compleja realidad que pasan dichos sectores fue revelada por el presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), Julio Roda, quien indicó que la baja de precio y el flagelo del contrabando ‘liquidaron’ al sector arrocero y ahora amenazan con dejar igual efecto a los actores de la cadena productiva oleaginosa, azucarera y láctea.
Roda dijo que le han pedido al Gobierno vetar el ingreso de mercancías por la frontera con Argentina y Brasil mientras dure la zafra cañera y la cosecha de trigo.
Respecto a este último cultivo, el titular de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), Reinaldo Díaz, dijo que si no se refuerzan los controles en las fronteras para frenar el ingreso de granos y productos terminados de trigo, este sector correrá la misma suerte que los arroceros.
Advirtió que si no se toman previsiones en cuanto a exigencia de certificado fitosanitario de origen y factura de exportación, el mercado nacional se inundará de harina de trigo y caerán los precios.
Alertó que en agosto empezará la cosecha de 150.000 hectáreas de trigo -estiman una producción de 360.000 toneladas- y hasta ahora las molineras y la estatal Emapa han garantizado la compra de 180.000 toneladas.
“Vamos a pedir al Gobierno que nos compre el excedente -180.000 toneladas- y que dicte un decreto que prohíba la importación de harina y grano de trigo por seis meses”, apuntó.
El sector maicero también sufre las consecuencias de la caída de precios y el contrabando.
El quintal del grano en el mercado se cotiza de Bs 32 a 35 y los productores piden un precio ‘justo’ por encima de Bs 70 para compensar los costos operativos y de producción.
Justamente esta problemática reunió, ayer, a la dirigencia sectorial y a productores del Chaco cruceño con el viceministro de Tierra, Jhonny Cordero, para abordar este asunto.
Los productores advirtieron, al igual que los trigueros, que tienen todo listo para empezar la cosecha de 50.000 hectáreas y alcanzar una producción de unas 200.000 toneladas del grano. Pidieron renegociar los precios de venta y que el Gobierno facilite la exportación de 50.000 toneladas. Estiman más de 350.000 toneladas de maíz acopiadas en silos.
De su lado, Cordero comprometió notificar las demandas sectoriales a los ministerios correspondientes e indicó que en el gabinete de ministros el presidente Evo Morales instruyó reforzar los controles para evitar el contrabando.
Crecimiento comprometido
Fuentes sectoriales del agro advierten que la problemática de los precios bajos y el contrabando repercutirá en la disminución de la frontera agrícola por la desmotivación que reina entre los productores.
Fuente: periódico "El Deber"
No hay comentarios:
Publicar un comentario