Con un potencial hidrocarburífero en constante ascenso, el Estado boliviano se trazó la meta de constituirse este año en el principal articulador de la integración energética entre los países de Sudamérica.
El ministro de Hidrocarburos y Energía, Luis Alberto Sánchez, destacó el martes, en el V Congreso Internacional YPFB Gas & Petróleo 2015, los resultados del proceso de la nacionalización de los recursos naturales, que, entre otras cosas, permitió al país fijarse varias metas, como la universalización de los servicios básicos, la implementación de bonos sociales para los niños, los adultos mayores, la madre y su hijo, como efecto de la redistribución de los ingresos económicos del país.
“Este año nos planteamos la nueva meta como país, ser articuladores principales de una integración energética”, sostuvo.
Este objetivo, continuó Sánchez, permitirá consolidar el gran reto del país que es consolidarse en la región como el corazón energético o centro distribuidor de hidrocarburos y electricidad, para lo cual, el Gobierno, a través de las estatales YPFB y la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE), viene dando “pasos gigantes” con la firma de convenios binacionales, como el realizado en los recientes días con Argentina, Paraguay, Perú y Brasil.
La petrolera boliviana será el distribuidor mayorista de Gas Licuado de Petróleo (GLP) en las poblaciones del sur de Perú. En la actualidad envía gas natural a Brasil y Argentina.
Los ingresos previstos por renta petrolera para la presente gestión es de $us 6.000 millones, según Sánchez.
Por su parte, el presidente de YPFB Corporación, Guillermo Achá, destacó que en los últimos años se pudo establecer a la petrolera estatal como referente internacional.
En este marco, el Ejecutivo agregó que el Congreso que se realiza en la ciudad de Santa Cruz aglutina a más de 25 empresas de alto nivel mundial, mayor a la participación registrada en gestiones anteriores.
“En este contexto de reducción de precios, YPFB se sabe mantener, Bolivia está económicamente estable, y eso es algo que
Fuente: periódico "Cambio"
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