La Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera (AJAM) tiene en proceso de trámite 651 solicitudes para la suscripción de nuevos contratos mineros. El director ejecutivo de la AJAM, Carlos Soruco, informó a Cambio que estas solicitudes fueron iniciadas en la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) y pasaron a la entidad reguladora para continuar su proceso hasta su conclusión. Estas solicitudes fueron registradas a partir del 23 de agosto de 2013 hasta el 28 de mayo de 2014, cuando se promulgó la Ley 535 de Minería y Metalurgia en la región de Oruro.
Recordó que antes, bajo el régimen de la Superintendencia minera, se otorgaban concesiones al sector minero, pero a partir del año 2008 la figura de la concesión desaparece y el Estado boliviano emite contratos.
Entonces fue la Comibol la que asumió la responsabilidad de otorgar contratos hasta 2013. Con la Ley 535 la AJAM pasa a atender los procesos de adecuación de concesiones a contratos, pero bajo su nivel desconcentrado, es decir que las solicitudes que se realizan en La Paz se tramitan en esta región o aquellas que se presentan en Oruro siguen su curso en este departamento y Chuquisaca, además hay direcciones de Santa Cruz, Cochabamba, entre otros departamentos.
“Ellos son ahora, con esta nueva ley minera, los que van a atender todas estas atribuciones (...) la facultad de suscribir contratos”, apuntó.
Añadió que a partir de la descentralización de la AJAM estos trámites serán transferidos a las respectivas regiones para su correspondiente atención.
Explicó que ya fueron suscritos 215 contratos mineros de los más de 900 transferidos de Comibol, mientras que quedan pendientes 446 que también serán pasados a las direcciones regionales y el resto que fueron rechazados por diversos motivos, como ejemplo por estar en zonas protegidas.
“Buena cantidad (de las solicitudes) está en Potosí, Tupiza. En La Paz es lo más grande, (aquí) hay más solicitudes”, manifestó Soruco.
Explicó que desde su posesión en la AJAM, el 26 de octubre de este año, se conformó un equipo con los propios funcionarios para la presentación de un plan de reorganización institucional y presupuestaria, además de delimitar las funciones de la institución, que fueron aprobadas por el Ministerio de Minería.
Al respecto, el Gobierno aprobó el miércoles un decreto supremo que establece que la AJAM estará compuesta por los siguientes niveles de organización: nivel ejecutivo, nivel de apoyo, nivel técnico operativo y nivel desconcentrado.
Ahora la entidad tiene carácter autárquico, independiente, con autonomía técnica, jurídica y patrimonio propio.
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