La Federación Sindical de Trabajadores Petroleros de Boliviana se declaró en estado de emergencia por temor a un masivo despido de servidores y el congelamiento del incremento salarial dispuesto por el gobierno para este año.
Según la circular Nº 010/17 difundida este jueves por el comité ejecutivo de la Federación, los sindicatos petroleros orgánicamente constituidos, se declararon en “estado de emergencia” por la amenaza de inestabilidad laboral en el sector.
Asimismo por “la decisión de frenar el derecho al incremento salarial, medidas que estarían aplicando sin la mínima coordinación con la parte sindical”.
La Federación a la cabeza de su ejecutivo José Domingo Vásquez, informa que realiza gestiones con autoridades del gobierno nacional para que se respete los derechos laborales, no obstante el temor de ser rebasados por sus bases, debido al creciente malestar por la incertidumbre laboral.
El comité ejecutivo instruye a sus sindicatos y trabajadores de todo el país, estar atentos a una conferencia nacional ampliada de secretarios generales “para asumir medidas que sean necesarias” en su compromiso de luchar por la estabilidad laboral.
De acuerdo a fuentes sindicales, hasta antes de la salida de Guillermo Achá de la presidencia de YPFB, había la decisión de cumplir el incremento salarial a los trabajadores de la Casa Matriz, avalado por el exministro de Hacienda, Luis Arce Catacora.
Sin embargo con el arribo de Oscar Barriga a la presidencia ejecutiva de YPFB el pasado 15 de junio, ninguno de los acuerdos cerrados con la gestión de Achá tuvo continuidad, por el contrario se anunció un plan de reingeniería institucional que dio paso a una inestabilidad laboral.
Estimaciones señalan que Casa Matriz de YPFB tendría al menos unos 4.000 trabajadores de los cuales 1.500 estarían en la franja de despidos forzosos y otros con contratos vencidos y sin posibilidad de renovar, mientras se diseñe el plan de reorganización interna.
Fuente: periódico digital "ERBOL"
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