lunes, 20 de abril de 2015

Separadora de líquidos da más vida a la frontera en Yacuiba

Antes de llegar a la planta, en  el camino se divisan  dos columnas metálicas que se erigen entre la densa vegetación del bosque chaqueño. Estos pilares forman parte de  la Planta de Separación de Líquidos Gran Chaco "Carlos Villegas”. Este proyecto, desde que comenzó a gestarse  a mediados del 2012, impulsó  un movimiento económico en esta  ciudad y en las  zonas aledañas.

Conforme a datos otorgados por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), no sólo se generaron empleos en la planta, sino que también se subcontrataron otros servicios, como  de transporte y de catering (servicio de alimentación). 
A ello se suma el  aumento de centros de  hospedaje y el  comercio  que se registra con más fuerza en los últimos años, a raíz de la construcción de la  factoría. 
"El flujo económico en la zona, desde inicios del proyecto en julio de 2012 a marzo de 2015, fue de 82 millones de dólares”, afirmó el presidente de YPFB, Guillermo Achá.
El impulso que vive esa región  puede vislumbrarse  en la cantidad de empresas que se crearon en los últimos dos años. En 2012, en Yacuiba operaban 661 empresas. Para 2014, la cifra se elevó a 1.775, según datos de Fundempresa.
Entre los tipos de empresas que tuvieron mayor crecimiento estuvieron las de ventas por mayor y menor, que pasaron  de 248 empresas, el 2012, a 794, el 2014. Similar situación atravesó la   industria manufacturera,  de 49 empresas a 139; las de actividades de alojamiento y servicios de comida,  de 33 a 117; las de transporte, de 35 a 100;  y las de servicio administrativo, que pasaron de ser  16 a 105.
Empleo en la comunidad
YPFB, según declaraciones de su presidente, empleó 2.700 personas en la planta, lo que significó 2.268 empleos directos y 432 indirectos. El expresidente del Comité Cívico de Yacuiba, Rudy Pantaleón, quien estuvo a cargo de la promotora de empleos en la comunidad, confirma que la factoría generó 5.000 empleos.
"También produjo empleos indirectos con relación a empresarios privados  y un movimiento económico considerable en la prestación de servicios, hotelera y alquiler de vivienda”, indica.
Miren Sagasti, directora de proyecto en Técnicas Reunidas, comenta que aquellas personas empleadas como mano de obra en la planta "obtuvieron una capacitación previa” en YPFB. Recalcó que el 95 % del personal es boliviano. "Los extranjeros estamos en partes supervisorias, en trabajos muy especializados”, agrega.
No obstante, Mario Cavera, concejal electo de Yacuiba, observa que los trabajos que se otorgaron a los pobladores eran en los cargos más bajos. "La pena es que toda esta mano de obra simplemente fue de ayudantes, es decir, quienes menos ganan”, lamenta.
¿Problemas medioambientales?
El presidente del Comité Cívico Juvenil de Yacuiba, Luis Castro, afirma que no sólo hay que centrarse en los beneficios que deja la planta separadora, sino en el impacto ambiental. 
"Ahora, con lo de la petroquímica, la gente se emociona por el movimiento económico. Por ahora nadie se preocupa por el impacto ambiental, no sólo de ésta, sino de la termoeléctrica del sur”, apunta.
Hugo Galarza, asesor del Concejo Municipal, concuerda con esta idea. "Hay que señalar que toda extracción hidrocarburífera genera daños medioambientales. Más allá de todas las medidas que se pueden tomar”, advierte.
No obstante, el encargado de responsabilidad social de YPFB, Juan Aguirre, asegura que en la separación del gas natural esta compañía no está utilizando ni  agua ni  químico alguno. "Por lo tanto, la contaminación ahí podría decirse que es cero”, afirma el funcionario.
Entre otras preocupaciones, Cavera menciona el problema  de que este proyecto esté cerca de la ciudad de Yacuiba. "Habrá  un gran movimiento de  cisternas y, de acuerdo al plan de Yacimientos, éstas van a ir por barrios. Eso es algo inaudito”, se queja.
Respecto a esto, Aguirre niega la posibilidad de que las cisternas pasen por la ciudad, dado que se construye un camino alterno de acceso a la Planta. "Por ahí vamos a transportar el GLP, camiones cisterna (...). Estamos previendo que ninguno de estos acceda a Yacuiba como tal”.
Más a allá de todo, Luis Castro reflexiona en torno a los empleos y su temporalidad: "El trabajo de la gente de la zona es temporal, en todo lo que significa los servicios. Como decimos acá, estamos preparados para los trabajos temporales”.
Fuente: periódico "Página Siete"

No hay comentarios: