El "oro negro” cerró ayer en 42,50 dólares el barril, luego de que el jueves descendió a 42,27 dólares, debido a una mayor oferta en el mercado internacional, el decrecimiento de la economía y la devaluación de la moneda china.
La Ley de Hidrocarburos 3058, de 2005, creó el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), con una alícuota de 32% sobre la producción fiscalizada. Es la principal fuente de ingresos para las gobernaciones, alcaldías y otros sectores.
El presidente del Estado, Evo Morales, anunció el 6 de agosto, que el país dejará de percibir 2.500 millones de dólares por exportaciones este año.
Raúl Velásquez, investigador de la Fundación Jubileo, explicó que el IDH es el mecanismo que permite mayor redistribución, porque hay varios actores como los departamentos productores, no productores y el resto que va al Tesoro General de la Nación (TGN) (ver cuadro).
En este último, precisó, hay un 5% que se destina al Fondo de Desarrollo de Pueblos Indígenas; Fondo Compensatorio a departamentos con mayor población La Paz, Cochabamba y Santa Cruz. También está el fondo para masificar el GNV; la Policía, las Fuerzas Armadas y algunos bonos como la Renta Dignidad, que también se financia con dividendos de empresas capitalizadas.
"Al descender el precio del crudo es una variable que hace modificar todos estos beneficios y que deja un impacto en la disminución de recursos”, advirtió Velásquez.
El investigador sugirió a las regiones e instituciones crear un fondo de estabilización, con el fin de contrarrestar la baja del petróleo e ingresos del gas.
Paralelamente dijo que se debe hacer un debate público en las gobernaciones, alcaldías y universidades, para dar un mejor destino a los recursos que reciben.
El economista Julio Linares y el experto en hidrocarburos Hugo del Granado también coincidieron en anticipar que la Policía, Fondo Indígena y otros beneficiarios evidenciarán disminución de las transferencias que reciben.
"Los que más sentirán son los pequeños municipios. También tendrán esta reducción la Policía, Fuerzas Armadas, Fondo Indígena, Renta Dignidad. Debido a estas caídas del precio tendrán que reformularse los presupuestos previstos para estos sectores”, consideró Linares.
Del Granado enfatizó que principalmente las repercusiones serán sociales. Ante este panorama, las regiones tienen que reajustar sus presupuestos, reducir gastos en el corto plazo y los municipios deben ser más eficientes en la recaudación de los impuestos locales. "La fijación de los ingresos este año en base a un precio de 80,3 dólares el petróleo, creó falsas expectativas tanto en los municipios como en las gobernaciones y en las otras entidades que perciben ingresos por concepto de la coparticipación en el IDH”, manifestó Del Granado.
Las transferencias
El Gobierno proyectó que las transferencias del TGN y las regalías subirán de 20.839 millones de bolivianos, en 2014, hasta 25.096 millones de bolivianos este año, según el Presupuesto General del Estado 2015.
Para las gobernaciones se anticipó que los ingresos subirían de 6.745 millones de bolivianos a 8.022 millones de bolivianos, en los municipios de 11.024 millones de bolivianos a 13.444 millones de bolivianos. El presupuesto de las universidades debía subir de 3.070 millones de bolivianos a 3.630 millones de bolivianos.
El ministro de Economía, Luis Arce, sostuvo que pese a la caída del precio internacional del petróleo, los ingresos previstos para las gobernaciones y municipios se están cumpliendo como se había proyectado.
Fuente: periódico "Página Siete"
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