En el marco del análisis coyuntural y proyecciones de la economía desglosado en el programa El pueblo es noticia, que difunde Bolivia TV, el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Luis Arce, a tiempo de refutar las observaciones vertidas por analistas que advierten una reducción de ingresos por la caída del precio del petróleo, manifestó que este escenario adverso data de 2009 y que justamente este año -el precio del barril de petróleo cayó de $us 145 a 30- Bolivia alcanzó el crecimiento más alto de la región con un 3,4%.
Para el ministro este fenómeno no es nuevo porque, según dijo, el país ya enfrentó este tema de precios bajos. “Bolivia ha experimentado este ciclo de pequeñas caídas y desplomes. Pese a este escenario, en 2014 vamos a tener el mayor crecimiento de la región", dijo.
Arce reconoció que las fluctuaciones del precio del petróleo afectan a los ingresos que percibe el país por las ventas de gas a Argentina y Brasil. Explicó que desde el año 2012 se han registrado caídas en el precio por millar de BTU que descendió hasta los $us 8, pero que esa caída no afectó las inversiones y que las bajadas proyectadas en 2015 fueron incluidas en el Presupuesto General del Estado (PGE) de este periodo.
Arce alejó un impacto en la economía atribuyendo una sólida ‘musculatura’ basada en el modelo económico social, comunitario y productivo que se afianza en la demanda interna de los bolivianos.
En torno a las proyecciones para 2015, dio cuenta de que el Gobierno prevé una inversión pública de $us 6.179 millones que se destinarán para infraestructura básica, potenciamiento de sectores productivos, proyectos de industrialización y programas de asistencia social a áreas rurales. El sector privado prevé invertir $us 2.000 millones en 2015.
La CBHE fija una posiciónEn criterio de la presidenta de la Cámara Boliviana de Hidrocarburos y Energía (CBHE), Claudia Cronenbold, la caída del precio de petróleo a escala global generará una reducción de ingresos en las empresas y el país si no aumenta la producción de crudo, aunque cree que el impacto puede variar de acuerdo con las medidas y el presupuesto establecido.
Cronenbold sostuvo que 2015 será un año “desafiador” para la industria petrolera boliviana por la reducción de al menos un 30% del precio del petróleo, que se estima continuará el siguiente año. “Para que no afecte a las empresas se requiere un aumento del volumen de producción para compensar en alguna medida la disminución de ingresos”, manifestó la ejecutiva.
Analistas han advertido que la baja de precio del petróleo condicionará las expectativas de ingreso por exportación de hidrocarburos.
Fuente: periódico "El Deber"
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