Tras el golpe de una pala cargadora frontal que perforó el Oleoducto Carrasco-Cochabamba (OCC) que pasa por Ivirgarzama, en Chapare, se provocó el derrame de aproximadamente 400 barriles de petróleo. El crudo fue hallado en el cauce del río Magareño, a 10 kilómetros de donde estaba el ducto, según reporte de Radio Kawsachuncoca.
YPFB-Transporte informó en un comunicado que el daño fue reparado y que no se afectará la distribución de combustible.
Asimismo, dijo que la zona fue aislada, que el producto derramado fue contenido con equipos y materiales especializados y que continuará con la limpieza.
Según el reporte de Kawsachuncoca (RKC), cerca de las 07:30 de ayer maquinaria pesada contratada por un vecino para cargar tierra a una volqueta, causó la rotura y la fuga de petróleo que afectó a tres domicilios particulares y tres vehículos, además de ingresar al río Magareño.
Jonás Alegre, periodista de ese medio, reportó que hizo un recorrido de unos 10 kilómetros río abajo y que el petróleo corría mucho más allá. Dijo que la gente trataba de extraer el crudo con bidones.
El río Magareño se conecta directamente con el río Sajta que desemboca en el Ichilo.
YPFB Transporte informó que la afectación ocurrió en el kilómetro 46+395 de la vía a Santa Cruz.
En un boletín de prensa difundido anoche explicó que, tras detectar la caída de presión del oleoducto, en la Estación Carrasco, aproximadamente a las 08:00 de ayer detuvo inmediatamente la operación del ducto e inició los trabajos de reparación en el sitio afectado.
Añade que se espera restituir el servicio de transporte del ducto en un plazo estimado de 24 horas.
El área afectada ha sido aislada y el producto derramado fue contenido con equipos y materiales especializados para este fin. En el transcurso de los próximos días YPFB Transporte continuará con las actividades de limpieza y remediación del área afectada en conformidad con los procedimientos y la normativa vigente. El tiempo de interrupción de la operación del oleoducto no afectará la producción de los campos del área Norte ni el abastecimiento del producto a las refinerías, señala el boletín.
Según el investigador del Centro de Documentación e Información de Bolivia (Cedib), Pablo Villegas, el derrame de crudo generará “serias” consecuencias en la población que mantenga cualquier tipo de contacto.
Afirmó que los “aromáticos” que desprende el vapor del petróleo causan mareos y vómitos en la gente que inhale ese aire contaminado, además de afectar el sistema ecológico del lugar por el derrame en el suelo y en el agua.
Explicó que la acción inmediata que debe asumir la empresa es reportar el daño que causó el derrame y realizar una auditoría de impacto ambiental en la que los directos afectados participen como fiscalizadores.
“El petróleo es una sustancia compleja que contiene varios componentes y muchos son cancerígenos, es una sustancia tóxica venenosa. Desde ya la evaporación puede provocar malestares a la gente que está en la cercanía”, afirmó Villegas.
Apuntes
El Oleoducto Carrasco-Cochabamba transporta parte del volumen de crudo hacia la Refinería Gualberto Villarroel de Cochabamba.
La capacidad de transporte del ducto es de 14.500 barriles por día.
YPFB Transporte se encarga de transportar hidrocarburos para el mercado interno y de exportar a lo largo de una red de ductos de más de 6.400 kilómetros.
Fuente: periódico "Los Tiempos"
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