En el primer bimestre del presente año, la inflación se podría mantener baja a pesar del incremento de algunos artículos de primera necesidad, pero en el corto plazo el cambio climático podría provocar un ajuste de precios de algunos productos.
Los economistas, José Luis Evia y Darío Monasterio, coincidieron al indicar que si bien se registró una baja inflación en 2015 (2.95 por ciento) dependerá de la sequía y las precipitaciones pluviales.
De acuerdo con Evia, hasta la fecha el país experimentó una baja inflación y esto se debe a varios factores, como la caída de la demanda a nivel internacional, debido a la crisis mundial, así como por la importación de productos básicos.
Sin embargo, los fenómenos naturales y el medioambiente podrían modificar este panorama y la situación puede cambiar el porcentaje de la inflación así como el precio de algunos productos agrícolas.
El fenómeno de El Niño, que se registra cada cierto tiempo, puede provocar sequía y esto a la vez ocasionar escasez de cierto tipo de alimentos, agrega.
OFERTA
Esta situación podría ocasionar la elevación del precio de estos, debido a que la oferta sería menor a la demanda. El mercado agrícola todavía no se recupera y los valores se mantienen bajos.
Pero en el caso de departamento de La Paz, la situación es más complicada, ya que a las inclemencias del tiempo se debe sumar ahora el aumento de pasajes en el transporte público, que tendrá sus efectos en el valor de algunos productos de la canasta familiar.
NEGOCIACIÓN
Por su parte, Monasterio señala que en la negociación que ingrese el Gobierno con la Central Obrera Boliviana (COB) los productos de la canasta familiar serían parte del debate.
En mayo, aproximadamente, se informó que el porcentaje del aumento salarial no pasaría de 5 por ciento, debido a que la inflación de 2015 terminó con menos de 3 por ciento.
Sin embargo, señaló que si los productos aumentan de precio será en porcentajes mínimos; la desaceleración de la economía evitará un mayor incremento, vaticinó.
Manifestó que algunos productos podrían aumentar de precio, pero necesariamente aquellos de la canasta familiar. Monasterio dejó en claro que esos cambios de precios en algunos productos afecta más a algunos segmentos de la economía y que sufren más debido a que sus ingresos son menores limitados.
En los últimos meses, el país registró sequías e inundaciones, además de desborde de ríos, cuyos efectos monetarios podrían trasladarse al sector agrícola, por una menor oferta e incidir en los precios.
Fuente: periódico "El Diario"
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