El presidente de la Cámara Nacional de Minería, Canalmin, Saturnino Ramos, indicó que Bolivia, en más de 180 años de vida republicana, no pudo industrializar un solo kilo de mineral debido a que el país no cuenta con una política de Estado que garantice los procesos hacia este fin.
“Nosotros simplemente somos industriales, en la parte extractiva hasta la refinación, que sería concentración de minerales, ahí termina nuestro oficio, de ahí el proceso sigue hasta la parte de la fundición”, señaló.
Asimismo, explicó que existen algunos emprendimientos, como el caso de la empresa minera Coro Coro, en La Paz, que procesa cobre y busca obtener productos más refinados como lingotes o planchas, pero “después de eso, a industrializar, a producir conductores eléctricos o cables, todavía no estamos en ese campo, nos falta mucho, solo hasta refinación hemos llegado”, según el reporte de Erbol.
Otro de los problemas que existen y que poco ha cambiado, en el país, es que “el sistema de producción, que se utiliza, sigue siendo similar a los utilizados desde los tiempos de los barones del estaño”, aseguró.
“(Actualmente) casi mantenemos (el mismo sistema), especialmente en nuestro sector (la pequeña minería) mantenemos, en el sector de las cooperativas también se mantiene, en el sector de la Comibol más aún, en la parte del (mineral) tradicional, el estaño, hasta ahora apenas hemos llegado a fundir en Vinto, es lo único”, aseveró.
ESTADO
Según el representante de la pequeña minería, las empresas mineras dependientes del Estado, como Huanuni, “sólo han logrado mecanizar un poco más el proceso de concentración, pero continúan utilizando el mismo sistema de antes: la gravimetría y la flotación”.
Otro de los factores que impide que el país pueda tener un emprendimiento total de la minería es que, actualmente, el gobierno no brinda la seguridad jurídica a los inversionistas, agregó Ramos.
“Bolivia –sostuvo– todavía no tiene la capacidad para invertir sola, necesita de la inversión privada, mientras otros países van en movilidad, (respecto a sus inversiones), nosotros todavía vamos a pie”.
“El señor Presidente (Evo Morales) ha dicho queremos socios, pero seguramente los socios quieren rayar la cancha y saber cuánto van a ganar, cuánto van a invertir y qué tiempo les van a garantizar”, reflexionó, pero una vez que los capitales y la tecnología están en el país te dicen, “no señor, ahora esto es nacionalización, es una situación que asusta a los inversionistas”, dijo.
Fuente: periódico "El Diario" La Paz-Bolivia - 17/05/2011
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