La séptima planta especializada en termoeléctrica que se instalará en los próximos tres años (2011-2014) en el Proyecto Siderúrgico del Mutún demandará 450 megavatios (MV) cuando toda Bolivia consume actualmente 1.100, informó anoche el gerente de comunicación de Jindal Steel Bolivia, Eduardo Prudencio, durante la presentación del proyecto en la Expoindustria 2011 en el campo ferial de la laguna Alalay.
“Nuestra planta no es a carbón, sino a gas, mucho más avanzada en tecnología. Para eso, se necesita una planta termoeléctrica (…). En la planta vamos a consumir la mitad de lo que actualmente consume Bolivia y todo esto funciona a gas. Por tanto, necesitamos gas”, dijo Prudencio, resaltando la construcción de otras seis plantas establecidas en el Contrato de Riesgo Compartido firmado en 2007 entre la Empresa Siderúrgica del Mutún (EMS) y la multinacional Jindal Steel Bolivia.
El responsable de comunicación explicó que el interés de Jindal para presentar el proyecto en Cochabamba es que la población “entienda los desafíos del proyecto más ambicioso que va a tener Bolivia”.
Consultado sobre la viabilidad que tiene el megaproyecto, que sufrió retrasos en los últimos meses, Prudencio resaltó que la relación actual entre los ejecutivos de la ESM y de Jindal está “en un buen momento” y que el compromiso con el Gobierno y el país es que, hasta fines de 2014, se tiene que producir acero, priorizando el mercado interno y la industrialización.
Además, Prudencio expresó cinco desafíos que la empresa tiene que subsanar en los siguientes meses como la disponibilidad de gas para la energía eléctrica, el acceso vía lacustre y terrestre, la habitación en Puerto Busch, los recursos humanos y la disponibilidad de agua que van a necesitar ya que utilizarán cinco piscinas olímpicas con 99,5 por ciento de reciclaje. “Si estos desafíos no son subsanados, no existe el proyecto”, aseveró.
Fuente: periódico "Los Tiempos" Cochabamba-Bolivia - 05/08/2011
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