La negociación se encamina a establecer un sistema de garantías recíprocas para la compra y venta de gas.
La negociación entre YPFB y el Gobierno argentino avanza con miras a cerrar el acuerdo antes del 22 de enero. El país vecino está dispuesto a pagar multas en caso de demoras en pagos, pero reclama descuentos en los precios si Bolivia no cumple con los volúmenes acordados.
Estos puntos son parte del nuevo convenio que ambos países suscribirán próximamente en La Paz, en ocasión de la posesión del segundo mandato del presidente Evo Morales, según el portal hidrocarburosBolivia.com.
Argentina y Bolivia van camino a establecer un sistema de garantías recíprocas para suministrar más gas desde Bolivia hasta el sistema de la Transportadora Gas del Norte (TGN) que abastece el NOA (noroeste argentino), y desde donde se derivará fluido para el GNEA (gasoducto del noreste argentino GNEA).
Por las dudas, en la estatal argentina Enarsa también trabajan para que el proyecto del GNEA –que abastecerá a las provincias de Chaco, Corrientes, Misiones, Formosa y norte de Santa Fe– reciba gas del sur del ese país a través del gasoducto Transmagallánico que viene de Tierra del Fuego, en caso de que Bolivia no cumpla con lo pactado.
En esa línea trabajan técnicos del Ministerio de Planificación, a cargo de Julio De Vido, y sus pares bolivianos. El objetivo es que la presidenta Cristina de Kirchner firme el acuerdo junto a Evo Morales el próximo 22 de enero, cuando el presidente boliviano estrene su nuevo mandato. En Planificación, sin embargo, todavía no pueden asegurar que esa fecha se cumpla.
“Estamos pensando en una adenda al contrato que está firmado por 20 años, porque Bolivia no garantizó el gas y ellos se quejan de que la Argentina demoró algunos pagos”, explicaron allegados a De Vido según informa el portal regionnortegrande.com.ar.
Las fuentes remarcaron que “no se está hablando sobre modificaciones en los precios”. Sucede que el valor del gas boliviano –se calcula en base a una canasta de productos energéticos y ronda los $us 6 el millón de BTU– triplica el precio del mercado local y fue uno de los grandes puntos de discusión cuando se firmó el acuerdo original, en 2006.
En las últimas semanas se incrementaron las reuniones entre equipos técnicos de ambos países. Autoridades de uno y otro lado de la frontera están de acuerdo en dos puntos: la Argentina debería sufrir multas en caso de atraso en los pagos y Bolivia tendría que aplicar descuentos a los valores de venta del fluido si no alcanza a enviar los volúmenes pactados.
Fuente: periódico "Cambio" La Paz-Bolivia - 07/1/2010
La negociación entre YPFB y el Gobierno argentino avanza con miras a cerrar el acuerdo antes del 22 de enero. El país vecino está dispuesto a pagar multas en caso de demoras en pagos, pero reclama descuentos en los precios si Bolivia no cumple con los volúmenes acordados.
Estos puntos son parte del nuevo convenio que ambos países suscribirán próximamente en La Paz, en ocasión de la posesión del segundo mandato del presidente Evo Morales, según el portal hidrocarburosBolivia.com.
Argentina y Bolivia van camino a establecer un sistema de garantías recíprocas para suministrar más gas desde Bolivia hasta el sistema de la Transportadora Gas del Norte (TGN) que abastece el NOA (noroeste argentino), y desde donde se derivará fluido para el GNEA (gasoducto del noreste argentino GNEA).
Por las dudas, en la estatal argentina Enarsa también trabajan para que el proyecto del GNEA –que abastecerá a las provincias de Chaco, Corrientes, Misiones, Formosa y norte de Santa Fe– reciba gas del sur del ese país a través del gasoducto Transmagallánico que viene de Tierra del Fuego, en caso de que Bolivia no cumpla con lo pactado.
En esa línea trabajan técnicos del Ministerio de Planificación, a cargo de Julio De Vido, y sus pares bolivianos. El objetivo es que la presidenta Cristina de Kirchner firme el acuerdo junto a Evo Morales el próximo 22 de enero, cuando el presidente boliviano estrene su nuevo mandato. En Planificación, sin embargo, todavía no pueden asegurar que esa fecha se cumpla.
“Estamos pensando en una adenda al contrato que está firmado por 20 años, porque Bolivia no garantizó el gas y ellos se quejan de que la Argentina demoró algunos pagos”, explicaron allegados a De Vido según informa el portal regionnortegrande.com.ar.
Las fuentes remarcaron que “no se está hablando sobre modificaciones en los precios”. Sucede que el valor del gas boliviano –se calcula en base a una canasta de productos energéticos y ronda los $us 6 el millón de BTU– triplica el precio del mercado local y fue uno de los grandes puntos de discusión cuando se firmó el acuerdo original, en 2006.
En las últimas semanas se incrementaron las reuniones entre equipos técnicos de ambos países. Autoridades de uno y otro lado de la frontera están de acuerdo en dos puntos: la Argentina debería sufrir multas en caso de atraso en los pagos y Bolivia tendría que aplicar descuentos a los valores de venta del fluido si no alcanza a enviar los volúmenes pactados.
Fuente: periódico "Cambio" La Paz-Bolivia - 07/1/2010
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