Sin inversiones en el sector petrolero, Bolivia se encamina a quedarse aislada energéticamente debido a que Chile, Brasil y Argentina pronto inaugurarán plantas de Licuefacción, y comprarán gas de Asia y oriente medio, según Jorge Quiroga Ramírez, ex Presidente del país.
A pesar de que tienen que aumentar más recursos para comprar gas de otros productores lejanos, Asia y Oriente Medio, los países no escatiman, para la construcción de plantas de LNG (Gas Natural Licuado), dinero para asegurar la provisión del energético a sus mercados.
A pesar de que tienen que aumentar más recursos para comprar gas de otros productores lejanos, Asia y Oriente Medio, los países no escatiman, para la construcción de plantas de LNG (Gas Natural Licuado), dinero para asegurar la provisión del energético a sus mercados.
“La inversión no existe en hidrocarburos”, sentenció Jorge Quiroga en el seminario que brindo en instalaciones de la UPB sobre La Economía en la Constitución Política del Estado, la mañana de ayer, e indicó que las plantas que tienen esos países requerirán 50 millones de metros cúbicos diarios en un futuro próximo, más de lo que vende Bolivia a Brasil.
Entre tanto la inseguridad jurídica, las supuestas nacionalizaciones y la mala administración de las empresas del Estado no muestran atractiva a Bolivia al capital privado.
Quiroga dijo que la venta de gas a países vecinos podría generar ingresos por aproximadamente 3.200 millones de dólares y en regalías alcanzaría a 1.600 millones de dólares, si se confirma la demanda que requerirán en el futuro.
En su momento, Jorge Téllez, ex Viceministro de Hidrocarburos, dijo que Bolivia no sólo dejará de producir sino que podría comprar combustibles a los países vecinos, a precios del mercado internacional.
El país ya empezó a importar combustibles en menor cantidad y en el futuro aumentar el volumen, si es que las autoridades nacionales no ejecutan un plan de inversiones para elevar la producción y las reservas naturales de gas.
Para Quiroga no hubo un proceso de nacionalización, sino más bien una compra de las empresas capitalizadas con sobre precio y una mala administración, que manejó el sector de hidrocarburos sin control y con fideicomisos.
En su momento, Boris Gómez Úzqueda, consultor en hidrocarburos, opinó que Bolivia tiene potencial para convertirse en el centro energético de la región, pero que para ello necesitaba de inversión extranjera.
Recomendó que se cambie la Ley 3050 de Hidrocarburos para que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) pueda asociarse con privadas para emprendimientos económicos en el sector.
Se informó que las exportaciones de hidrocarburos alcanzaron en el 2008 3.458 millones de dólares, y que 3.157 millones son atribuibles a las ventas de gas natural y poco más de 300 millones al petróleo.
En términos globales, un 91,3 por ciento de las exportaciones del energético corresponde al gas natural, siendo que éstas representan un 45,3 por ciento de las ventas nacionales totales, según se pudo confirmar en un informe de la Cámara Boliviana de Hidrocarburos (CBH).
NO se APROVECHÓ
LA BONANZA
El año pasado, Bolivia recibió importantes recursos por la venta de gas al Brasil y Argentina debido al incremento del barril de petróleo en el mercado internacional, como ejemplo se mencionó que los valores alcanzaron entre 8 y 10 dólares por BTU.
Los municipios, alcaldías, prefecturas y el Tesoro General de la Nación se beneficiaron con más recursos, pero la situación cambió a finales del año pasado por la caída de la cotización del precio del petróleo, que llegó hasta 33 dólares el barril de crudo. Y hoy oscila entre 68 a 70.
“Mientras países vecinos aprovecharon la bonanza económica y ahorraron para encarar este periodo de vacas flacas, Bolivia no hizo lo mismo”, dijo y acotó que ahora le espera una situación difícil por la baja del petróleo en el mercado internacional.
Sin embargo, autoridades de Gobierno indicaron que el país tuvo dos años consecutivos de superávit y se incrementaron las Reservas Internacionales Netas. Y que está preparado para enfrentar este periodo.
Sin embargo, Quiroga advierte que Bolivia se posiciona como país vendedor de sólo materias primas y no con valor agregado, que genera empleo y diversifica la oferta nacional.
En su momento analistas y expertos en temas hidrocarburíferos señalaron que el país si hubiera realizado las inversiones en el sector hubiera podido ofrecer el gas a precios competitivos a los países vecinos y convertirse en el centro energético de la región.
Fuente: periódico "El Diario" La Paz-Bolivia - 23/06/2009
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