El presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Carlos Villegas, reveló ayer que al nacionalizar Transredes, actual YPFB Transporte, no sólo se asumió una deuda por impuestos, sino también otros pasivos por 286 millones de dólares, que la transportadora de hidrocarburos tenía con acreedores.
Villegas, en todo caso, aclaró que “los pasivos no son parte del valor de la empresa, porque se pagan con el flujo de caja de la misma”. Dijo que el cálculo de compra fue del valor patrimonial, es decir, activos menos pasivos.
El Gobierno inicialmente informó que por la nacionalización de Transredes, YPFB pagó 241 millones de dólares a las empresas transnacionales Shell y Ashmore, ex accionistas mayoritarias.
Villegas, en todo caso, aclaró que “los pasivos no son parte del valor de la empresa, porque se pagan con el flujo de caja de la misma”. Dijo que el cálculo de compra fue del valor patrimonial, es decir, activos menos pasivos.
El Gobierno inicialmente informó que por la nacionalización de Transredes, YPFB pagó 241 millones de dólares a las empresas transnacionales Shell y Ashmore, ex accionistas mayoritarias.
El martes, Villegas informó que, además, se asumió una deuda a Impuestos de 50 millones de dólares; sin embargo, según el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN), el pasivo tributario que asumió era 34 millones de dólares. Ayer admitió que el monto correcto es el que maneja el Fisco.
El presidente de YPFB habló en el programa “Que no me pierda” de la red Uno, en el cual estuvo invitado también un periodista de La Razón.
En el set, Villegas informó además que YPFB Transporte se hizo cargo de las deudas por créditos.
“En la actualidad, y eso viene de tiempo atrás, YPFB Transporte tiene una deuda de largo plazo de 286 millones de dólares, una deuda cuyos acreedores son la Corporación Andina de Fomento (CAF), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), los tenedores de bonos, la banca local, etc. Cuando pagamos, hemos adquirido también esta deuda”.
Del monto, este año se deben pagar 55 millones de dólares de capital y 25 millones de intereses.
Aclaró que en ese contexto no sólo se compraron los pasivos, sino también los activos de la empresa. Destacó que la empresa es una compañía en bonanza, que el 2008 obtuvo una ganancia de 322 millones de bolivianos, con altos niveles de liquidez y una calificación de riesgo “AA2”, que la hace una firma de alta gestión y administración.
“Además, al 31 de mayo del 2009, tiene un flujo de caja de 118 millones de dólares, para hacer frente a las inversiones que tiene que realizar, el pago de deudas y las reservas requeridas”.
El ex presidente de YPFB Transporte Gildo Angulo acusó a Villegas, el viernes pasado, de cometer una serie de irregularidades, entre ellas el haber autorizado un pago por Transredes de 250 millones de dólares, pese a que sabía que además se estaba asumiendo una deuda de 200 millones de dólares.
Villegas dijo que Angulo reaccionó así luego que supo que sería destituido. Agregó que el ahora ex titular de YPFB Transporte técnicamente no era el hombre adecuado para manejar la empresa.
“Luego de una evaluación de tres meses pude observar que en el caso de YPFB Transporte, (Angulo) no era la persona indicada para la presidencia. Ahí necesitamos una persona con solvencia técnica, que administre los gasoductos y oleoductos por donde fluyen tres mil millones de dólares y donde se deben realizar en adelante inversiones importantes”.
La brigada parlamentaria de Santa Cruz, ayer anunció la interpelación a Villegas y al ministro del sector, Óscar Coca, para investigar las denuncias de Angulo.
Angulo critica la estrategia
Gildo Angulo, el recién destituido presidente de YPFB Transporte, opinó que el Gobierno pudo haber evitado o enfrentado el posible arbitraje internacional con los capitalizadores de Transredes si se hubiese iniciado un proceso legal por el derrame de crudo ocurrido el 30 de enero del 2000 en Desaguadero.
El lunes, el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Carlos Villegas, explicó que cuando se nacionalizó Transredes, convertida hoy en YPFB Transporte, se pagaron 241 millones de dólares al consorcio TR Holding, y además se liberó a la transportadora de pagar 50 millones de dólares de pasivos al Fisco.
Villegas dijo que se asumió esa determinación para evitar un arbitraje internacional que, en caso de perderlo, hubiese costado mil millones de dólares a Bolivia.
Angulo indicó ayer que el presidente de YPFB justificó con el arbitraje para ocultar las falencias respecto a la condonación de los pasivos.
“Decir que Bolivia iba a perder un arbitraje es un burdo teatro”, dijo. Redacción Central y Santa Cruz.
Fuente: periódico "La Razón" La Paz-Bolivia - 19/06/2009
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