Cuatro proyectos para industrializar el gas con una inversión de al menos 3.300 millones de dólares aún no tienen fecha de inicio, de acuerdo con el Plan de Inversiones 2010-2026 de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB). Sólo con un proyecto, la planta de plásticos, el país incrementaría diez veces el ingreso actual por la comercialización del energético.
En el capítulo Plan de Industrialización, del documento mencionado, se explican las inversiones y tareas para la planta de amoniaco y urea (fertilizantes), la de polímeros o de fabricación de polietileno, gas to liquid (GTL) para producir diésel oil y nafta; y junto con Braskem, de Brasil, la fábrica de plásticos. Sin embargo, no establece un cronograma de avances y conclusión.
Algunos de estos proyectos sólo tienen estudios y otros, como el de Braskem, quedaron en el memorando de entendimiento entre Brasil y Bolivia.
Conforme a la Ley de Hidrocarburos 3058, la industrialización del gas es la transformación química que le da valor agregado al energético.
Esto implica extraer los componentes del gas, como el metano, del que a su vez se puede obtener el amoniaco o urea para producir fertilizantes y explosivos; el metanol, que permitirá producir combustibles solventes; también se puede extraer el diésel y la gasolina; del eutileno y propileno (compuestos basados en etano) se obtienen cauchos y plástico; y también se puede generar el gas natural líquido (LNG).
El Gobierno, después de emitir el Decreto 28701, de nacionalización de los hidrocarburos, comprometió la pronta industrialización del energético para generar mayores ingresos para el país y además empleos.
El compromiso surgió después de un movimiento social en octubre de 2003 que desembocó en unas 70 muertes y en la renuncia del hasta entonces presidente Gonzalo Sánchez de Lozada.
El proyecto con menor avance es el complejo de plásticos.
El analista en hidrocarburos Hugo del Granado, en su columna de opinión publicada en La Prensa el domingo 30, precisó que “cuando el personero de esta empresa (Braskem) efectuó su presentación y respondió a las preguntas formuladas, sólo pudo decir que el último contacto que hubo entre el Gobierno y Braskem se remonta a un memorando de entendimiento firmado el año 2007”.
Según el documento de presentación de la empresa en el Congreso de Hidrocarburos Energía y Gas desarrollado entre el 19 y 20 de agosto, una tonelada de gas vendido genera cerca de 200 millones de dólares, pero si se industrializa en petroquímica, el valor se eleva a 700 millones de dólares.
Y si se completa el proceso y se convierte en plástico, el valor asciende incluso hasta 3.000 millones dólares, es decir, diez veces mas por la misma tonelada.
El 26 de mayo de 2006, los Gobiernos de Venezuela y Bolivia firmaron un memorando de entendimiento que incluyó la implementación de un complejo petroquímico para producir fertilizantes que debe ser encarado conjuntamente entre Pequiven y YPFB en una sociedad.
Según el Plan de Inversiones, la planta se instalará en Bulo Bulo (Cochabamba) y se necesita al menos 1.000 millones de dólares de inversión en un complejo con una capacidad de procesamiento de 600.000 toneladas métricas anuales de amoniaco y 726.000 de urea.
También requiere de la ampliación de la red de gas para un consumo de dos millones de metros cúbicos diarios (MMmcd), esto significa 103 millones de dólares adicionales.
A la fecha, Pequiven usó un millón de dólares para ocho estudios preliminares, entre éstos, el de localización, la adquisición del terreno y el económico-financiero.
Un segundo proyecto, también con Pequiven, es el de la planta de polímeros en el Gran Chaco para la producción de polietileno, para el mercado interno y para la exportación.
El complejo, con una capacidad de 500.000 toneladas métricas anuales, requiere 1.800 millones de dólares. Adicionalmente tiene un presupuesto de 600.000 dólares para los estudios preliminares. Según YPFB, sólo se ha concluido la fase de visualización de los estudios de macro y microlocalización del proyecto.
En el proyecto GTL se invertirán 500 millones de dólares para producir 12.750 barriles diarios de diésel y 2.250 de nafta. La fecha estimada es 2015.
Del Granado sostuvo que no existe un avance del proyecto porque no se cuenta ni siquiera con los estudios y el suministro de gas no está garantizado.
Más datos
YPFB calcula que para la industrialización requerirá 20,6 millones de metros cúbicos de gas.
2 La demanda no se cubrirá con la actual producción ni con la capacidad máxima de 65 MMmcd.
2 En el mejor de los casos habrá gas para el proceso gas to liquid y la planta de fertilizantes.
Fuente: periódico La Prensa La Paz-Bolivia 2/09/2009
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