El embajador de Argentina en Bolivia, Horacio Macedo, dijo a La Razón que su país requiere certeza jurídica para construir el Gasoducto al Noreste Argentino (GNEA). Indicó que la adenda al contrato suscrito entre ambos países, en octubre del 2006 y que fenece el 2026, garantizará el cumplimiento por parte de Bolivia de los volúmenes demandados por la Argentina.
¿Cómo están avanzando las negociaciones para la modificación del contrato de compra y venta de gas natural suscrito entre ambos países?
Efectivamente se está avanzando en una adenda del contrato que se firmara en octubre del 2006 (...). Pero lo cierto es que el cronograma no se cumplió como así tampoco frente a la imprevisibilidad de saber en qué tiempo se iba a conseguir el volumen con los tiempos previstos para la construcción del GNEA. Entonces, en base a estos componentes, lo que se está haciendo es trabajar en una modificación del acuerdo (...).
¿Cuáles son los principales puntos que se discuten? Le hago esta consulta toda vez que el ministro de Hidrocarburos de Bolivia, Óscar Coca, decía que el precio no se toca pero sí se harán ajustes a los plazos.
Lo que le digo son los cronogramas. Nosotros teníamos una agenda, un cronograma de volúmenes que iban en ‘in crescendo’ hasta llegar a los 27 millones de metros cúbicos día. Esto es lo que está en conversación entre los dos países para darle certidumbre y previsibilidad, es decir, saber cuánto efectivamente se va a ir incrementando los volúmenes de venta por año.
¿Argentina todavía tiene interés en el gas boliviano?
Nosotros obviamente tenemos interés en el gas boliviano, particularmente porque el crecimiento previo a la crisis que venía teniendo la Argentina, del orden del 8%, ameritaba la necesidad de contar con mayores volúmenes de gas. De todas maneras, a pesar de la crisis, nosotros tenemos una promesa con una gran parte de la Mesopotamia Argentina (provincias de Misiones, Corrientes y Entre Ríos). Esa zona todavía no tiene redes, ni industriales ni domiciliarias de gas.
Eso quiere decir que esta región se aprovisionaría del gas boliviano. O, como se ha anunciado estos días por medio de la prensa, ¿Chile podría suministrarle gas a la Argentina?
No soy técnico en la materia. Simplemente he visto lo que dicen en la prensa respecto de la decisión de Chile de autorizar las ventas de gas a la Argentina. Usted sabe que hoy es a la inversa, pero esto no significa que la Argentina no pueda tener interés en el gas boliviano.
El precio del gas boliviano es competitivo…
Es el mejor precio que pagamos a Bolivia.
Mi pregunta iba dirigida a si el precio es competitivo frente a otros proveedores, como en el caso del GNL que Argentina importa de otros países.
En este momento no sé cuánto se está pagando.
El dato que maneja YPFB es de $us 6 el millón de BTU.
Debe ser porque esto sube y baja de acuerdo con el barril, de algunos subproductos ricos del gas, etc. Pero una cosa no impide otra. Nosotros lo que necesitamos sí es previsibilidad en el tiempo. ¿Se imagina que de esto va a depender qué tipo y qué calidad de gasoducto se construye?
En todo caso se ratifica el interés…
Sí, estamos trabajando. A nosotros nos interesa este acuerdo, que lo entendemos estratégico entre Argentina y Bolivia. No sólo es una venta accidental de gas boliviano, sino un contrato a largo plazo —importante para ambos países— que requiere de previsión y de certeza jurídica.
¿Esto tiene que ver con que Bolivia cumpla con los volúmenes acordados?
Como le digo. Cuando hablo de previsibilidad es que tenemos que saber qué volúmenes realmente vamos a recibir, y Bolivia lógicamente qué precio y en qué condiciones lo va a recibir. Y entonces esto abrirá las puertas para dar certeza también a las inversiones que hay que realizar (en la construcción del GNEA).
¿Chile puede ser una buena alternativa para Argentina?
Podría ser una buena alternativa, pero técnicamente no conozco cuáles son las condiciones en que Chile nos ofrece a nosotros gas (natural licuado).
Fuente: periódico "La Razón" La paz-Bolivia - 17/11/2009
No hay comentarios:
Publicar un comentario