La reactivación del proyecto de construcción de la planta de extracción de líquidos del gas en Río Grande (Santa Cruz) le costará al Estado 60 millones de dólares adicionales a los 90 millones que se presupuestaron cuando se licitó la obra en 2008 y fue adjudicado a la asociación accidental Catler Uniservice.
Así y según el Plan de Inversiones quinquenal 2010-2015 de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), el nuevo cálculo de los recursos de financiamiento asciende a 150 millones de dólares.
Pero los 60 millones de dólares adicionales no tienen financiamiento; considerando que 35 millones son parte de una carta de crédito en un banco estadounidense, el saldo para la conclusión del proyecto es de 115 millones.
A pesar de que La Prensa solicitó a YPFB una explicación sobre el incremento, no respondieron hasta el cierre de esta edición (20.00).
El miembro del directorio de Yacimientos Johnny Suxo confirmó que el proyecto de construcción de la planta es parte del Plan Quinquenal.
El aumento en los costos, según la explicación que recibieron de la estatal petrolera, obedece a que en el proyecto original no se hicieron “buenos cálculos” y no se incluyeron algunos ítems, dijo.
Suxo no supo explicar estas falencias y se limitó a argumentar que son temas técnicos que debe aclarar YPFB.
El Plan de Inversiones, manifestó, fue aprobado por el Directorio hace dos semanas aproximadamente, pero cada uno de sus proyectos debe ser expuesto individualmente antes de contar con el visto bueno de esa instancia.
La planta de extracción de licuables es uno de los proyectos prioritarios del Gobierno en el sector de hidrocarburos, ya que permitirá extraer los líquidos del gas que se exporta a Brasil y obtener Gas Licuado de Petróleo (GLP) y gasolina.
Según el Plan Quinquenal, la planta podrá procesar un caudal de gas de 5,66 millones de metros cúbicos diarios (mmcd), operación con la cual se proyecta obtener 350 toneladas de GLP por día y 600 barriles de gasolina.
Yacimientos estima que el proyecto entrará en actividad durante el primer trimestre de 2011. Su construcción fue adjudicada en julio de 2008 a la asociación accidental Catler Uniservice (sociedad boliviano-argentina) bajo un contrato firmado con Yacimientos.
No obstante, la empresa adjudicataria subcontrató a tres extranjeras: Gulsby Process System, Sica Metalúrgica Argentina y Lito Gonella, también argentina.
A la fecha, este contrato se encuentra en proceso de anulación en la Corte Superior de Justicia a pedido de YPFB y con la aceptación de la socia boliviana Uniservice SRL, pero con la negativa de Catler. Esta decisión se asumió después de que una investigación del Ministerio de Transparencia y Lucha contra la Corrupción encontrara irregularidades en la licitación, adjudicación y contratación de la obra, e identificara como principal responsable al ex presidente de Yacimientos Santos Ramírez.
Éstas derivan en un posible daño económico de 16 millones de dólares. Entretanto, 35 millones están en el Commerce Bank de Estados Unidos bajo la figura de una carta de crédito y 3,3 millones de dólares fueron pagados directamente a Catler.
Las mencionadas irregularidades son objeto de un proceso de investigación del Ministerio Público para establecer las responsabilidades de autoridades y empresas.
Hasta hace algunos meses, el Gobierno calculaba concluir el proyecto con las empresas subsidiarias con las que Catler Uniservice negoció la construcción de los equipos de la planta separadora.
Para Catler, el contrato está vigente
El presidente de la Catler Internacional, Agustín Melano, aseguró que el contrato para la construción de la planta separadora de líquidos de Río Grande está en plena vigencia. En declaraciones realizadas al diario Crítica de Argentina la semana pasada y reproducidas por el portal hidrocarburosbolivia.com, el empresario aclaró la situación de su empresa en el país.
“En Bolivia, la participación fue puramente técnica en una unión transitoria de empresas. El contrato está en vigencia. La planta está construida en Estados Unidos en un 73 por ciento y se montará en Santa Cruz”. Aclaró además que él no está siendo procesado —como afirman los medios en Bolivia— y que sólo fue citado a declarar dos veces “como testigo”.
Catler Uniservice fue contratada por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) para que construyera la planta separadora de líquidos de Río Grande, obra que se encuentra estancada.
Melano pretende firmar un contrato para el abastecimiento de gas criogenizado a 16 comunas del sur de Santa Fe, Argentina. Pero algunas alcaldías que se enteraron del escándalo en Bolivia por el caso YPFB-Catler Uniservice, ya dieron marcha atrás.
Cronología
En julio de 2008, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos y la asociación accidental Catler Uniservice firman el contrato para la construcción de la planta separadora de liquidos en Río Grande.
El 27 de enero muere asesinado en La Paz el empresario Jorge O’Connor, propietario de Uniservice, la empresa asociada a Catler.
El 1 de febrero entra en curso la investigación a cargo del Gobierno sobre YPFB relativa al proceso de adjudicación del proyecto.
La planta de Río Grande producirá gasolina y gas licuado de petróleo.
Fuente: periódico "La Prensa" La Paz-Bolivia - 13/11/2009
No hay comentarios:
Publicar un comentario